Roturas fibrilares: recupérate de ellas con estos 4 ejercicios

Las roturas fibrilares son uno de los riesgos a los que nos enfrentamos las y los futbolistas cada vez que entrenamos o jugamos un partido, aunque también pueden ocurrirnos en la vida cotidiana por un movimiento brusco o un pequeño traumatismo. Aquí te mostramos varios ejercicios que pueden ayudar a recuperarte tras una rotura fibrilar.

Además, te contamos sus causas, cómo prevenirlas y cuál es su tratamiento.

 

¿Por qué se producen las roturas fibrilares?

 

Los músculos de nuestro cuerpo están hechos de fibras envueltas en una capa llamada fascia. Pueden encogerse y estirarse según el estímulo que reciben. Pero, si se contraen demasiado o de manera repentina, las fibras pueden romperse. Esto causa un dolor repentino y un hematoma que nos detiene en seco.

Entre los futbolistas populares, estas roturas son más frecuentes al principio del ejercicio, sobre todo si no se ha calentado bien la musculatura. En futbolistas de élite, son más frecuentes después de un sobreesfuerzo, como al final de la carrera o después de una jugada límite.

 

roturas fibrilares

 

Debemos acudir al médico…

 

  • Si el dolor no cede con la aplicación de hielo.
  • Si hay endurecimiento de la zona afectada o un hematoma. exagerado, si aparece en pacientes que toman anticoagulantes.
  • Si, en casos más graves, hay deformidad en la zona con imposibilidad para realizar algún movimiento.

 

Cómo prevenir las roturas fibrilares

 

  • Se debe calentar antes de comenzar el ejercicio.
  • Mantenerse en forma.
  • No llegar a fases de esfuerzo extremo.
  • Mantener una alimentación equilibrada con aporte de proteínas, electrolitos y agua para prevenir la deshidratación que favorece también este tipo de lesiones.

 

roturas fibrilares

 

Tratamiento de roturas fibrilares

 

  1. En lesiones leves, con rotura de algunas fibras, el tratamiento a seguir es la aplicación de hielo en las primeras horas reposo deportivo.

 

  1. En lesiones agudas: el tratamiento sería aspiración,con aporte de plasma rico en plaquetas. Además, en caso de rotura grave que incluya la fascia y la retracción de los extremos musculares, el tratamiento a veces es quirúrgico.

 

roturas fibrilares

 

EJERCICIOS PARA RECUPERARSE DE LAS ROTURAS FIBRILARES

 

Para evitar las roturas fibrilares debemos:

  1. Evitar las sobrecargas.
  2. Los esfuerzos bruscos con el músculo en frío.

 

Por ello, el calentamiento y los estiramientos jugarán un papel muy importante en estas lesiones. Además, es muy importante respetar el tiempo de cicatrización del tejido.

 

roturas fibrilares

 

Aquí te ofrecemos algunos ejercicios para facilitar la recuperación de una rotura fibrilar en los isquiotibiales, una de las más frecuentes entre deportistas.

 

Están ordenados de menor a mayor esfuerzo y deben realizarse de forma progresiva, respetando los tiempos de recuperación del músculo. El número de repeticiones dependerá de cada persona y su condición física. Es recomendable realizarlos siempre con ambas piernas. Si notamos molestias en algún ejercicio, deberemos parar o reducir la carga.

 

1. Ejercicio con elástico (concéntrico)

  • Nos tumbamos boca arriba.
  • Estiramos una pierna lo más cerca de la vertical que nos sea posible, sin forzar, y colocamos un elástico alrededor del talón.
  • Bajamos la pierna hasta tocar la colchoneta y volvemos a subir.

 

Roturas fibrilares

 

2. Ejercicio sobre pelota

  • Nos tumbamos boca arriba con los pies encima de la pelota y elevamos los glúteos hasta alcanzar la diagonal y bajamos lentamente.
  • Es un ejercicio de alta demanda muscular que también mejora el equilibro.

 

Roturas fibrilares

 

3. Sentadilla con carga posterior a una pierna

  • Nos colocamos de pie sobre una pierna, la otra flexionada hacia adelante y los brazos extendidos.
  • Realizamos una bajada hasta donde podamos sin sobrepasar los 90º de flexión de la rodilla y subimos lentamente.
  • Podemos agarrarnos si no tenemos mucha estabilidad.

 

Roturas fibrilares

 

4. Ejercicio excéntrico

  • Para este ejercicio necesitaremos a una persona que nos fije los tobillos.
  • Nos pondremos de rodillas con el tronco recto y los brazos a la altura de los hombros para frenar la caída.
  • Desde esa posición bajaremos lentamente hacia adelante de forma controlada, hasta que notemos bastante tensión en los isquiotibiales, y entonces nos dejaremos caer sobre la colchoneta.
  • Este ejercicio es muy potente y hay que realizarlo en una fase final de la lesión.

 

Roturas fibrilares

 

¿Estás buscando ejercicios para mejorar tu técnica en tus entrenamientos de fútbol? Aquí tienes varios consejos:

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