Aprende a nadar a espalda: ¡Te enseñamos cómo hacerlo fácil!

Aprender a nadar a espalda no es difícil, pero si nadie te ha enseñado a colocar el cuerpo o a mover tus brazos, quizá no te hayas atrevido a ello. En este post te contamos cómo hacerlo y aportamos unos ejercicios para que te conviertas en la envidia de la piscina 😉 . 

 

¿Por qué me parece difícil nadar a espalda?

Primero de todo tenemos que tener en cuenta dos factores:

1. El hecho de no saber cuánta distancia te queda hasta llegar a la pared mientras nadas. 
2. El otro es que no ves la tracción de brazos, por lo que las mejoras en tu longitud de brazada las conseguirás siguiendo tus percepciones de presión de las manos al apoyarse en el agua.

 

 

Colocación del cuerpo al salir de la pared

Debes buscar la posición hidrodinámica, es decir, la posición del cuerpo que ofrece menos resistencia.

• Al empujarte en la pared el cuerpo debe quedar perfectamente alineado, como si fueras una flecha -mira la foto-.
• Sobre todo recuerda colocar una mano encima de la otra, taparte las orejas con los brazos y tensar todo el cuerpo como si fueras un tronco de un árbol. Os lo mostramos fuera del agua para la mejor visualización posible.
• De este modo, cortas el agua, deslizas y aprovechas al máximo el empuje en la pared de las piernas.
• Mantén la posición durante 3 ó 4 segundos cada vez que te empujes con la pared.

 

 

Colocación del cuerpo en el agua al nadar

El cuerpo debe ir boca arriba lo más alineado  y cerca de la superficie posible.

Pero al nadar no debes estar todo el tiempo sobre tu espalda, porque debe ir girando de lado a lado con la cabeza fija como referencia, lo que en natación se llama “rolido”.

 

 

¿Cómo mover los brazos al nadar?

Para que puedas ver más fácilmente qué recorrido deben llevar tus manos y brazos al nadar espalda, os mostramos dichos movimientos fuera del agua para que no os perdáis detalle.

 

 

1. Empuje de la pared. Recuerda la posición hidrodinámica o de punta de flecha, que explicamos anteriormente.
2. La mano mira y empuja hacia los pies en un movimiento lateral del brazo. Recuerda que el cuerpo está girado hacia el brazo que realiza la brazada.

 

 

1. A mitad del recorrido y con la mano orientada hacia los pies, el codo se encuentra flexionado entre 80º y 90º. El cuerpo sigue girado hacia el lado del brazo que realiza la brazada.
2. Continúa con el codo flexionado. Al llegar a la altura de la cintura, la mano cambia de dirección, describiendo una curva hacia abajo.
3. La brazada acaba con la mano empujando por debajo del cuerpo, orientada, como siempre, hacia los pies.

 

Ejercicios para aprender a nadar a espalda

Te propongo un par de ejercicios para ayudarte a tomar conciencia, controlar el gesto y a partir de ahí poder mejorar tu técnica de nado.

 

Espalda con un brazo

• Un brazo pegado al cuerpo.
• Tienes que nadar con un brazo girando el cuerpo para ambos lados, tanto para el brazo que está pegado al cuerpo como para el que está en movimiento.
• Recuerda que la cabeza siempre permanece fija.

 

 

Punto muerto arriba

• Desde la posición lateral, un brazo por encima de la cabeza con la palma de la mano mirando hacia la pared lateral.
• El otro brazo extendido fuera del agua apuntando al techo de la piscina.
• Dale a los pies de forma potente para no hundirte.
• Desde esta posición, da de 6 a 10 patadas en esa posición, haz una brazada, cambia de brazo, y repite el proceso con el otro lado.

 

 

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